Veinticinco partidos de sanción para el delegado del Rafelcofer y otros seis para un jugador por la agresión al árbitro en Teulada

Veinticinco partidos de sanción para el delegado del Rafelcofer y otros seis para un jugador por la agresión al árbitro en Teulada
  27/03/2024

Veinticinco partidos de sanción para el delegado del equipo del Rafelcofer “por agredir al árbitro, precisando este asistencia médica y habiendo quedado acreditado la misma mediante partes médicos”, es la sanción más grande impuesta tras los incidentes de la pasada jornada en el partido que disputó el equipo de la Safor en Teulada. Además, otros jugador ha sido sancionado con seis partidos por “agresión en grado de tentativa” y otros dos por dirigirse al colegiado “con términos o actitudes de menosprecio o desconsideración”. Los otros dos sancionados, con un partido cada uno, lo fueron por lances del partido -doble amonestación y acumulación de tarjetas-. Además, el campo del Rafelcofer será clausurado con un partido “al ser reincidente en la comisión  de incidentes por parte del público protagonizados por sus simpatizantes”. 

El comité no ha tenido en cuenta las alegaciones presentadas por el club de la Safor porque “con la prueba aportada no se desvirtúa la presunción de veracidad de la que goza el acta arbitral, máxime cuando la misma está sesgada y no tiene solución de continuidad”. 

Es el triste balance que deja la agresión del árbitro que dirigió el partido Teulada-Rafelcofer, de Segunda FFCV, que terminó con un marcador de 5-0. Según relató el colegiado en el acta, el detonante de la agresión tuvo lugar tras la expulsión de un jugador visitante ya en el tiempo de descuento, lo que desencadenó además la invasión del terreno de juego por parte de un grupo de aficionados del citado equipo. En ese momento el colegiado, y siempre según su testimonio, se dirigió al túnel de vestuario “temiendo por mi integridad física debido a la actitud agresiva tanto de dichos aficionados como de los jugadores del equipo visitante”. Una vez allí fue empujado y golpeado por miembros del Rafelcofer, hasta que intervino la Guardia Civil. 

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