El poder de la opinión ajena

El poder de la opinión ajena
  07/10/2019

VERÓNICA MONSONIS (*)

Dice que había un gran grupo de ranas que siempre iba a divertirse al bosque. Todas cantaban y saltaban hasta que caía la noche. Permanecían muertas de la risa y nada las separaba.

            Un día, en su salida acostumbrada, fueron a conocer un bosque nuevo. Estaban en sus juegos cuando tres de ellas cayeron en un profundo foso del que ninguna se había percatado. Las restantes se conmocionaron. Miraron hacia el fondo del foso y vieron que era demasiado profundo. “Las perdimos”, dijeron.

            Las tres ranas caídas intentaron subir por las paredes del foso, pero era muy difícil. Apenas avanzaban un metro y volvían a caer. Las demás comenzaron a comentar que sus esfuerzos eran inútiles. ¿Cómo iban a lograr escalar una pared tan alta? Era mejor que se resignaran. No había nada que hacer.

            Dos de las ranas escucharon esos comentarios y comenzaron a rendirse. Pensaron que las demás tenían razón. La tercera rana, en cambio, siguió subiendo y cayendo, pero tras un par de horas, consiguió salir a la superficie. Las demás estaban asombradas. Una le preguntó: “¿Cómo lo lograste?” Pero la rana no contestó. Era sorda.

            ¿Por qué me afectan las opiniones de los demás? De un modo u otro, todos estamos atentos de lo que opinen los demás, y más aún de la opinión que tienen de nosotros mismos. Todos deseamos encajar y ser aceptados por el círculo social que nos rodea. El ser humano necesita sentirse dentro del grupo, y es por ello que tengamos tan en cuenta la opinión de las personas que entren en contacto con nosotros.

            Pero, cuando caemos en el terrible error de tener demasiado en cuenta las opiniones del resto, comenzamos a vivir a través de sus juicios y decisiones, dejando a un lado nuestro propio criterio y nuestra propia forma de ser. No podemos dejar a un lado nuestros deseos y necesidades para poder encajar. No podemos dejar de ser nosotros mismos, y convertirnos en marionetas de las opiniones ajenas.

(*) Psicóloga. Máster en Psicología Clínica y especializada en Educación Emocional y en Atención Temprana.

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